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Arte

Grupo flamenco durante una actuación

1. Reales Alcázares. Impresionante conjunto palaciego que puede recordar a La Alhambra de Granada por su famoso patio de estilo mudéjar. Los Reales Alcázares son ideales para admirar la belleza del arte árabe, pero no sólo eso, ya que aquí encontramos un mestizaje de estilos que nos lleva desde el arte islámico de los primeros propietarios hasta el barroco de las últimas grandes reformas. Recorrido imprescindible por la historia de Sevilla. Ver tarifas y horarios. Son Patrimonio de la Humanidad.

2. Giralda y Catedral de Sevilla. La Giralda, antiguo alminar de la mezquita de la ciudad, es hoy en día uno de los símbolos más destacados de toda Andalucía. Los dos tercios inferiores pertenecen a la época almohade, mientras que la parte superior fue construida en época cristiana para albergar el campanario de la Catedral de Sevilla (la catedral cristiana de estilo gótico más grande del mundo). Como curiosidad, aquí descansan supuestamente los restos de Cristóbal Colón, cuyo entierro se ha celebrado al menos 5 veces. El conjunto es Patrimonio de la Humanidad. Ver tarifas y horarios.

3. Torre del Oro. Aunque muchos sostienen que el nombre de esta atalaya se debe a sus reflejos dorados sobre el agua, lo cierto es que es más probable que su origen tenga relación con su uso como parte de una fortificación por la que los navegantes portaban grandes cantidades de oro hasta el Alcázar. Hoy alberga un museo naval que recoge importantes fragmentos de la historia de la ciudad. Ver tarifas y horarios.

4. Triana. Este popular barrio de Sevilla podría considerarse como una ciudad en sí misma, con su propia identidad y tradiciones. De hecho, el Puente de Triana, que cruza el Guadalquivir, lo separa físicamente de Sevilla. Aquí han nacido alguno/as de los toreros, cantaores, tonadilleras e incluso humoristas más famosos de España.

5. Archivo de Indias. Historia en estado puro. Creado en 1785 por orden de Carlos III, el Archivo General de Indias sirvió para reunir toda la documentación disponible sobre las colonias españolas en una ciudad que había tenido uno de los principales puertos del mundo. Hoy es un importante centro de investigación y puede visitarse bajo demanda, en grupos. Es Patrimonio de la Humanidad.

6. Plaza de España. Probablemente una de las plazas más reconocibles del mundo. Construida en 1929 con motivo de la Exposición Iberoamericana, esta gigantesca plaza destaca por sus famosos bancos con 48 provincias españolas, las dos torres barrocas que flanquean el semicírculo en sus extremos, la fuente central y el que canal que la bordea. Fue protagonista en Lawrence de Arabia y La Guerra de las Galaxias.

7. Santa Cruz. Este distinguido barrio de Sevilla, conocido como la Judería de Sevilla por haber albergado el antiguo barrio judío, recibe su nombre por la Parroquia de la Santa Cruz, originalmente ubicada en la plaza homónima. Destaca por su tradicional entramado de callejuelas y lugares ilustres como el Hospital de los Venerables o la Casa-Museo de Murillo.

8. Parque de María Luisa. Cedido a la ciudad por María Luisa de Borbón en 1893, estos antiguos jardines privados tomaron protagonismo en 1929, año en que fueron sede la Expo Iberoamericana. Aunque ya no es el único parque de la ciudad, ni el más grande, sigue considerándose como el Parque de Sevilla. Ideal para pasear y disfrutar con la familia.

9. Isla de la Cartuja. Más de 300 hectáreas, rodeadas por el Guadalquivir, fueron usadas en 1992 para albergar la Expo’92 de Sevilla. Hoy en día es un nuevo districto, del que podemos destacar algunos de los puentes que la unen con la ciudad (Alamillo y Barqueta), los antiguos pabellones (algunos de ellos abandonados y otros reconvertidos), Isla Mágica (un parque de atracciones) y el Parque Tecnológico Cartuja ’93.

10. Tradiciones. Sevilla es conocida mundialmente por algunas de sus expresiones folclóricas más vistosas. Un sevillano me comentaba con cachondeo que algunos turistas se decepcionan al no encontrar en cada esquina a un torero, una bailaora o un nazareno. Más allá de los tópicos, lo cierto es que si está mínimamente informado no le será difícil presenciar una corrida de toros en La Maestranza, contemplar una procesión en Semana Santa o divertirse con el baile flamenco en la Feria de Abril. Lo que podrá hacer todo el año, y a buen precio, es disfrutar de las increíbles tapas y raciones de los bares sevillanos.

Fuente: Los apuntes del viajero.